4-12-08
La pretensión de Francia de llevar a la ONU una propuesta para despenalizar la homosexualidad en todo el mundo ha puesto al Gobierno de Italia y al Vaticano en el bando de, en palabras de los colectivos homosexuales, "la homofobia". Si el lunes pasado la Santa Sede justificaba su no a la iniciativa francesa porque "pondría en la picota" a los estados que no reconocen las bodas gais, ayer fue el ministro de Exteriores italiano, Franco Frattini, quien dijo que el Ejecutivo de Silvio Berlusconi también está en contra porque "sería un gran error hacer una regla internacional de legitimidad de las relaciones familiares" entre personas del mismo sexo.
Aunque la iniciativa promovida por Francia, como presidente de turno de la UE, solo pide "la despenalización universal de la homosexualidad", sin entrar en los matrimonios homosexuales, tanto el Gobierno italiano como la Santa Sede han enfocado su negativa en estas uniones.
Frattini, en el papel de exégeta de las palabras que dos días antes había pronunciado Celestino Migliore, el representante permanente del Vaticano ante la ONU, dijo: "Creo que sus palabras deben ser bien leídas: cuando el Vaticano dice no a la resolución, no dice no a la tortura y la violencia contra los homosexuales".
Según anunciaron ayer, varias asociaciones de gais y lesbianas se manifestarán el sábado en la plaza de San Pedro, bajo el lema Nunca más asesinados por ser gais, para protestar contra el Vaticano. La propuesta francesa se tratará el próximo 10 de diciembre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario